miércoles, 20 de julio de 2011

bertolt brecht (eugen berthold friedrich brechter han culen, alemania, 1898 - 1956) // poesías - canción de la mujer / canción de la prostituta / canción de la viuda enamorada / canción de una amada / canción desde el acuario

canción de la mujer

1. de noche junto al río en el oscuro corazón de los arbustos
a veces vuelvo a ver su rostro, el de la mujer que amé: mi
mujer, que murió.

2. hace ya muchos años, y a ratos ya no sé nada de ella, la
que antes lo fue todo, pero todo se marchita.

3. y ella era en mí como un pequeño enebro en las estepas de
mongolia, cóncavas, con el cielo amarillo pálido y de gran tristeza.

4. vivíamos en una cabaña negra junto al río, los mosquitos
solían perforar su blanco cuerpo, y yo leía el periódico
siete veces o decía: tu pelo tiene un color sucio. o: no tienes corazón.

5. pero un día, cuando estaba yo lavando mi camisa en la
cabaña, ella se acercó a la puerta y me miró y quería salir.

6. y quien le había pegado hasta cansarse, dijo: ángel mío.

7. y quien le había dicho te quiero la condujo fuera y
riendo miró al aire y alabó el buen tiempo y le dio la mano.

8. como ya estaban afuera, al aire libre, y la cabaña estaba
desierta, cerró la puerta y se sentó tras el periódico.

9. desde entonces no la he vuelto a ver, y de ella sólo quedó
el gritito que dio cuando por la mañana volvió a la puerta que
ya estaba cerrada.

10. ahora la cabaña se ha podrido y mi pecho está relleno de
papel de periódico y por las noches tumbado junto al río en
el oscuro corazón de los arbustos me acuerdo de ella.

11. el viento lleva olor a hierba en el pelo y el agua grita sin
fin pidiendo calma a dios, y en mi lengua tengo un sabor amargo.


canción de la prostituta

1
señores míos, con diecisiete años
llegué al mercado del amor
y mucho he aprendido.
malo hubo mucho,
pero ése era el juego.
aunque hubo cosas que sí me molestaron
(al fin y al cabo también yo soy persona).
gracias a dios todo pasa deprisa,
la pena incluso; también el amor.
¿dónde están las lágrimas de anoche?
¿dónde la nieve del año pasado?

2
claro que con los años una va
más ligera al mercado del amor
y los abraza por rebaños.
pero los sentimientos
se vuelven sorprendentemente fríos
si se escatiman tanto
(al fin y al cabo no hay provisión que no se acabe).
gracias a dios todo pasa deprisa,
la pena incluso; también el amor.
¿dónde están las lágrimas de anoche?
¿dónde la nieve del año pasado?

3
y aunque aprendas bien el trato
en la feria del amor,
transformar el placer en calderilla
nunca resulta fácil.
pero, bien, se consigue.
aunque también envejeces mientras tanto
(al fin y al cabo no siempre se tienen diecisiete).
gracias a dios todo pasa deprisa,
la pena incluso; también el amor.
¿dónde están las lágrimas de anoche?
¿dónde la nieve del año pasado?


canción de la viuda enamorada

ay, ya sé, no deberla reconocer
que tiemblo cuando su mano me toca.
ay, qué me ha sucedido
que rezo para que me seduzca.
¡ay, ni cien caballos me arrastrarían al pecado!
¡si al menos no me apeteciese tanto!

si me resisto tanto al amor
sólo me he resistido realmente en el fondo
porque sé que si estuviera ante él en camisón
me dejaría hasta sin camisa.
¡como que le van a importar a él mis reproches!
¡si al menos no me apeteciese tanto!

dudo que valga tanto como yo
y que para él sea amor de verdad.
cuando todos mis ahorros se hayan gastado,
¿tirará el cacharro a la basura?
¡ay, ya sé por qué le opuse tanta resistencia!
¡si al menos no me apeteciese tanto!

si tuviera dos dedos de sentido
nunca le habría concedido lo que por desgracia me pidió,
sino que le habría pegado una paliza
en cuanto se me acercó demasiado, como hizo.
¡ay, ojalá se fuera al infierno!
(¡si al menos no me apeteciese tanto!)


canción de una amada


1. lo sé, amada: ahora se me cae el pelo por mi vida salvaje,
y me tumbo en las piedras. me veis beber el aguardiente más
barato, y camino desnudo al viento.

2. pero hubo un tiempo, amada, en que fui puro.

3. tuve una mujer que era más fuerte que yo, como la hierba
es más fuerte que el toro: se vuelve a erguir.

4. ella vio que yo era malo, y me amó.

5. no preguntó a dónde conducía el camino, que era su camino,
y quizás iba hacia abajo. cuando me dio su cuerpo, dijo:
esto es todo. y fue mi cuerpo.

6. ahora ya no está en ningún lado, desapareció como una
nube cuando ha llovido, la abandoné y cayó, pues ése era su camino.

7. pero de noche, a veces, cuando me veis beber, veo su cara,
pálida en el viento, fuerte y vuelta hacia mí, y me inclino ante
el viento.


canción desde el acuario

salmo 5
he apurado la copia hasta el fondo. es decir, he sido seducido.
era un niño, y me amaron.
el mundo se desesperaba, pues yo me mantenía puro. ella
se revolcó por el suelo ante mí, con miembros tiernos
y atrayente trasero. me mantuve firme.
para calmarla, cuando se excitó demasiado, yací con ella
y me volví impuro.
el pecado me satisfizo. la filosofía me ayudaba al amanecer,
cuando velaba. me convertí en lo que querían.
miré largo tiempo hacia arriba y pensé que el cielo estaba
triste sobre mí. pero veía que le era indiferente.
él se amaba a sí mismo.
ahora hace tiempo que me ahogué. yazgo hinchado sobre
el fondo.
los peces viven dentro de mí. el mar se está agotando.

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